Los centros comerciales en China idearon una ingeniosa
estrategia para atraer a las compradoras mujeres. Muchos ofrecen atractivos
“novios de compras” que se pueden alquilar por horas, a precios realmente
accesibles. Caminando a través de galerías de los centros comerciales de varias
ciudades chinas, es habitual ver hombres jóvenes y apuestos en marcos gigantes
con forma de caja de muñecas, decorados con corazones. Las tarifas comienzan a
partir de 1 yuan (USD 0.15) por hora, hasta 2 yuanes (USD 0.30). Los “novios de
compras” no solo acompañan a las mujeres que los alquilan en sus compras, sino
que también pueden brindar consejos, llevar bolsas, charlar, tomarse una foto
con el cliente, e incluso unirse a ellos para tomar una copa o comer algo en
los patios de comida de los centros comerciales. Sin embargo, sus contratos
prohíben específicamente el contacto físico, por lo que cualquier persona que
desee más de lo que se ofrecen, quedará decepcionada. La mayoría de los jóvenes
que se exhiben chinos son estudiantes universitarios que trabajan como modelos
a tiempo parcial para complementar sus ingresos. Pero mientras algunas aprecian
la compañía, otras se decepcionaron con la experiencia, diciendo que comprar
con un novio de verdad es mucho mejor que con un extraño, incluso con uno súper
apuesto. En un país donde los servicios de intercambio, desde bicicletas hasta
paraguas, son increíblemente populares, el intercambio de seres humanos estaba
predestinado a convertirse en realidad, tarde o temprano.
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